4/11/12

Punto . 10 - Especial SGAE


Punto . 10 - Especial SGAE


Las siglas SGAE son muy conocidas, pero ahora es un buen momento para dedicar un artículo especial a la Sociedad General de Autores y Editores. Considéralo como nuestro homenaje, ya que por estas fechas se celebra el centenario de su fundación.
Con sus 100 años de historia SGAE es una sociedad que debes conocer, pero te preguntarás, ¿qué hace exactamente esta sociedad? SGAE protege y gestiona los derechos e intereses morales y económicos de los siguientes creadores: Escritor, Compositor, Letrista, Autor Dramático, Coreógrafo, Mimo, Director-realizador de obras audiovisuales, Argumentista-guionista de o. audiovisuales, Autor de obras para producciones multimedia y Editores musicales y también de sus herederos hasta transcurridos 80 años de la muerte del titular, a partir de entonces sus obras pasan a ser "de dominio público" y no generan derechos, es pues una sociedad de gestión ya que recauda y reparte los fondos que corresponden a los autores y editores por la utilización pública o privada de sus obras. Evidentemente el trabajo de SGAE empieza cuando tu obra va a ser publicada y es precisamente en ese momento cuando debes pensar en asociarte. Antes se supone que tu trabajo ha quedado registrado en el Registro de la Propiedad Intelectual para protegerla (consulta Que lo Sepas FM 26).
En el caso de los creadores de música con o sin letra, existen dos fuentes principales de ingresos a tener en cuenta: la Reproducción/Distribución y la Comunicación Pública. La primera suele conocerse como Reproducción Mecánica, y es lo que pagan las discográficas para duplicar tus obras en los distintos soportes comerciales ( CD,s, vinilos, cassettes, minidisc, videos, etc.). Hay tres casos posibles:
       1- Si se quiere fabricar, p. e., un CD para venta en tiendas (caso normal), SGAE aplica la tarifa general, que varia según el precio de venta fijado por el productor y la cantidad de discos que se vayan a prensar. La cuota mínima es de 84,67 ptas./unidad+IVA.
       2- Si lo que se pretende fabricar son, p. e., CD,s para acompañar a otro bien o servicio (podría ser una revista), estamos ante una "producción especial", lo que significa que SGAE tendrá que solicitar el permiso expreso del autor para autorizar el uso de la obra. Su cuota varia en función de si incluye o no publicidad en la caja y la tirada de que se trate. Los primeros 5.000 sin publicidad salen a 84,67 ptas./unidad+IVA decreciendo gradualmente a medida que aumenta la tirada.
       3- Otra posibilidad podría ser incorporar música en un spot de TV, en una película de cine ó tal vez en una cuña radiofónica comercial, es lo que se llama Primera Fijación. Este derecho no esta cedido, por lo que SGAE tendrá que solicitar también el permiso expreso del autor para autorizar el uso de la obra y será éste el que fije el precio a cobrar a la productora.
Existe también un canon que SGAE cobra a los fabricantes de soportes vírgenes, es lo que se llama Copia Privada. Así, en el precio que pagamos por una cassette virgen, p. e., ya va incluida la autorización para grabar música.
Para ilustrar la importancia que tiene la Reproducción Mecánica vamos a dar unas cuantas cifras: En 1.998 la cantidad recaudada por este concepto ha sido la nada despreciable cantidad de 9.714 millones de pesetas, de los cuales 8.041 millones han correspondido a la fabricación de CD,s, discos, cassettes y videos comerciales y 1.673 millones a la recaudación por fabricación de soportes vírgenes.
El reparto de esas cantidades va a parar proporcionalmente a aquellos compositores incluidos en las listas de discos y cintas fabricados en ese año.
Ahora que ya sabes lo que pagan las discográficas, veamos que ocurre una vez que el disco sale al mercado. Entramos en el apartado de la Comunicación Pública, sin duda la fuente de ingresos más importante de SGAE. Lo primero que piensas cuando editas un disco es que sonará por radio y TV. Supón que te eligen para radio fórmulas, donde presentan la obra y a su intérprete, ó que te contratan para actuar en TV. Este es el subapartado de Ejecución Pública - Radiodifusión (¡suena fatal!). Imagina que tu tema es elegido como fondo musical en cualquier programa pero sin especificar el nombre de la obra, estaríamos en el subapartado de Reproducción Pública (este suena mejor). SGAE tiene establecidas unas tarifas que las emisoras deben sufragar y que no pocas veces cuesta cobrar. Con todo, los ingresos de SGAE por esos dos conceptos en el 98 ascendieron a 9.668 millones de pesetas. El sistema de reparto de esa cifra va en función de las hojas-programa que presentan las emisoras de TV y radios públicas y por el sistema de sondeos en el caso de emisoras comerciales. Es decir que si tu nombre aparece en las listas presentadas ó en los sondeos, recibirás una parte proporcional de esa bonita cantidad. Suerte la tuya...
Existe también dentro de la Comunicación Pública otro subapartado importante llamado Ejecución Mecánica (no confundir con Reproducción Mecánica). Este es el canon que pagan a SGAE todas los locales públicos tales como discotecas, salas de fiesta, disco bares, tablaos, cafés cantante, cafés concierto, salas de variedades y locales análogos en donde la música ocupa un papel determinante. Pagan en función de los m2 de la sala, precio copa, etc.. De todos ellos se ha recaudado en el 98, 3.308 millones de pesetas a repartir entre los agraciados por el sistema de sondeos; no es lo más justo pero sí lo más viable.
Y no podemos olvidar otros 2.629 millones (¿quién los olvidaría?) también repartidos por sondeos, que en el 98 fueron recaudados de todos los lugares públicos en donde existen aparatos de TV ó se utiliza música ambiental, incluídos los cines y videoclubes (hoteles, cafeterías, bares, oficinas, centros de trabajo, centros comerciales, aviones, buques, trenes y autobuses). Este es el verdadero caballo de batalla de SGAE, pues la mayoría se niegan a pagar y hay que pleitear hasta que se consigue.
Así las cosas, ¿ que ocurre con las música en directo?. Es el último subapartado por comentar y lo llaman Ejecución Humana (¡socorro!). contempla: Las Variedades, que son las actuaciones con un papel principal,es decir, conciertos y la ejecución humana propiamente dicha, que son las actuaciones en vivo que desempeñan un papel secundario de amenización, ya sabes orquestas de baile, dúos, solistas, etc.
En ambos casos los organizadores del evento pagan la tarifa establecida por SGAE para el hecho puntual. En el 98 se han recaudado 862 millones y el reparto se realiza en función de las hojas-programa de repertorio que rellenan los propios músicos ejecutantes o variedades.
Como ampliación al sistema de reparto diremos que el 79,83% de lo repartido se ha efectuado mediante la obtención de programas confeccionados por los usuarios, que contienen obra por obra, todas las utilizadas. El 14,61% se ha repartido mediante el resultado de los sondeos efectuados por una empresa especializada contratada por SGAE y el 5,56% restante se ha repartido por analogía con alguno de los anteriores.
Bueno, ahora que ya tenemos los dientes largos con tantas macrocifras, veamos que hay que hacer para ingresar en esta Sociedad. La primera condición sine qua non es poder acreditar que tienes al menos una obra estrenada ó publicada. Bastará con presentar el CD en el que apareces como autor ó coautor de alguno de los temas. Rellenas la solicitud. Adjuntas la relación de obras de las que seas autor. Firmas la declaración de no pertenecer a otra sociedad de gestión similar. Te reconocen la firma. Adjuntas tu curriculum y una fotografía de carnet. Declaras un seudónimo si lo deseas. Y firmas la declaración de pertenecer al menos a uno de los diez grupos de creación que vimos al principio. Entregas la documentación en la Secretaría General y esperas a que te avisen para la firma del contrato y pago de una pequeña cuota de admisión. A partir de ese momento te has convertido en socio "adherido" de SGAE. Si transcurrido un año tienes ya registradas un mínimo de tres obras con derechos objeto de gestión y has recibido al menos 200.000 ptas. por Comunicación y 100.000 ptas. por Reproducción, serás elevado a la categoría de socio "eventual". Los socios eventuales pasan automáticamente a socios ordinarios cuando han permanecido al menos tres años como eventuales y han recibido durante ese trienio 4 millones por Comunicación y 3 por Reproducción en obras de pequeño derecho, que son los temas que hacemos la gran mayoría (las obras de gran derecho son las sinfónicas y filarmónicas).
Como dato ilustrativo de lo que SGAE representa diremos que cuenta con 53.000 socios e ingresan cada año más de 3.000 de los que 2.500 son compositores. Los gastos sobre la recaudación que SGAE retiene para la administración de la propia Sociedad (instalaciones, salarios, Fundación Autor, eventos, etc.) representan un 16,50% del total.
Ni que decir tiene que SGAE trabaja en estrecha colaboración con todas las Sociedades análogas en todo el mundo, solo así es posible que puedas percibir tus derechos cuando provengan de cualquier país y viceversa, SGAE recauda y rinde a cada Sociedad los derechos de los autores extranjeros cuyas obras han sonado en nuestro país.
Es importante reseñar la inquietud creciente de SGAE por la protección de los derechos de autor de las obras distribuidas a través de internet y otras redes. En ese sentido está tratando de movilizarse en todos los campos, principalmente políticos, para plantar cara a las nuevas corporaciones de la comunicación global que tratan por todos los medios de desposeer y desacreditar el derecho de autor como si fuera una rémora arcaica al futuro deseado. Afortunadamente el pasado 11 de Febrero el Parlamento Europeo reforzó el control sobre los derechos de autor, en el sentido de contemplar la autorización del autor previa a toda copia digital y la obligación de remunerar a los autores de obras transmitidas o reproducidas por Internet. La batalla digital no ha hecho más que comenzar.
Es imprescindible reseñar también la gran labor que se está realizando para la modernización y promoción de los autores que los nuevos tiempos demandan a través de la Fundación Autor, como organizadora de múltiples eventos, homenajes, festivales, ciclos y presentaciones de todo tipo, con preocupación especial hacia las nuevas tendencias y tecnologías como herramientas básicas de la creación, no en vano tenemos como presidente del Consejo de Dirección a Eduardo Bautista García ("Teddy") que después de sus experiencias con Los Canarios, fue el auténtico pionero, a principios de los setenta, en el empleo de los sintetizadores en España con aquella magnífica adaptación electrónica de las Cuatro Estaciones de Vivaldi.
No podría concluir este artículo sin expresar mi propia experiencia personal, como miembro de SGAE con 20 años de antigüedad. Debo reconocer que la experiencia ha sido muy positiva, el trato recibido exquisito y la organización muy buena. Animo desde aquí a todos los posibles candidatos a que no dejéis de presentar vuestra solicitud, pero quizá con todas esas macrocifras que hemos estado comentando pudiera infundir una opinión equivocada de lo que puede percibir un autor cualquiera de los de a pié. La verdad es que tal y como está organizada SGAE en la actualidad, si un autor es objeto de una promoción extraordinaria y alcanza cifras de ventas considerables, con una difusión pública mayoritaria, puede llegar a obtener unos pingues ingresos por derechos, pero lo normal en el 99% de los casos es que la promoción sea bastante discreta y que la difusión sea limitada, por lo que verás tus ingresos de SGAE convertidos en una pequeña ayuda trimestral que siempre es bienvenida pero que irá decreciendo hasta convertirse en algo meramente simbólico. No obstante, larga vida a SGAE y que cumpla otros cien como poco.

+Anotamos que las licencias Creative Commons son interesantes para abrirse camino a nivel promocional y gratuito, pero es la via menos rentable al fin y al cabo.

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